De la calidad del aire que respiramos depende en gran medida nuestra salud. Debido a los altos niveles de contaminación que se encuentran en el ambiente, enfermedades respiratorias y alérgicas son cada vez más comunes. Olores desagradables como el que emerge de la automoción, el tabaco, polvo, construcciones, etc., son solo algunos de los que influyen directamente en el aire que llega a nuestros pulmones.
Por suerte, hay maneras de revertir estas afecciones, una de estas radica en los purificadores de aire. Estos son dispositivos especialmente fabricados para proteger a las personas de todos los factores contaminantes que se encuentran en el ambiente. Esta función es posible gracias a que tienen filtros que eliminan partículas dañinas como virus, bacterias y otras partículas.
Este tipo de dispositivos actualmente es muy demandado y se hicieron muy populares debido a la pandemia del coronavirus. De hecho, este mercado se ha ampliado, por lo que es posible elegir entre una gran cantidad de tipos y modelos, de acuerdo al lugar donde se desean instalar.
Se pueden usar en cualquier espacio. Es ideal tener uno en el hogar, en una estancia común o donde los miembros de la familia suelen estar con más frecuencia como el salón o los dormitorios. También se instalan en tiendas, espacios comerciales, oficinas, instituciones públicas, en cafeterías, bares y restaurantes.
Una de sus principales funciones, además de las ya mencionadas, es prevenir contagios de enfermedades virulentas en espacios cerrados.
Índice
Cómo funcionan los purificadores de aire
El funcionamiento de los purificadores de aire es muy sencillo. Prácticamente está basado en su filtro. Este tiene un dispositivo que es el que se encarga de atrapar las partículas que están presentes en el aire. Ahora bien, este proceso de filtración se cumple por fases, es decir, una vez que el aire ha sido purificado, se devuelve al medio ambiente.
Cuáles son los beneficios de usar un purificador de aire
Además de la explicación que hemos desarrollado a lo largo de este artículo que, evidentemente expone varios de los beneficios más elementales de usar este tipo de dispositivos, podemos agregar algunos más, como los siguientes.
Un mayor cuidado para ancianos y niños
Si tienes personas mayores en casa o niños pequeños, usar un purificador de aire está más que justificado. Gracias a su eficiente funcionamiento podrás garantizar que el aire que se respira en casa es más puro y podrás proteger mejor a los miembros de tu familia para que no contraigan enfermedades.
Hay que recordar que los niños pequeños y los ancianos son mucho más vulnerables a contraer virus o sufrir episodios de deficiencia respiratoria producto del polen (común en la estación primaveral) o mucho polvo si se vive en zonas concurridas y muy contaminadas.
Elimina malos olores
Uno de los estilos decorativos de las casas modernas es el concepto abierto. O sea, espacios comunes como el salón, el comedor y la cocina ahora se encuentran en un solo ambiente. Aunque es un estilo muy bonito y práctico, es más común que se mezclen olores, en especial los que provienen de la cocina. Con un purificador de aire podrás eliminar estos olores y mantener tus espacios más frescos.
¿Dónde comprar purificadores de aire?
Es muy importante aliarse con empresas que puedan ofrecer variedad en la venta de este tipo de productos. En tal sentido, HogarClimatizado es una excelente referencia, ya que tiene las mejores marcas y los modelos más cotizados del mercado y a buenos precios.
Entre las marcas más destacadas en purificadores encuentras Xiaomi, Philips, Levoit, Rowenta, Aiibot, Dyson y otras más. Para elegir el más adecuado, debes tomar en cuenta algunos factores importantes como:
- El tamaño del espacio donde se instalará el dispositivo.
- La potencia del purificador, la cual también está relacionada con el tamaño del lugar de instalación.
- El nivel de ruido. Es importante tomarlo en consideración en caso de que se vaya a instalar el purificador en el dormitorio de un bebé, por ejemplo.
- Los tipos de filtro también varían. Los hay de carbón activo, electrostáticos, secos y húmedos.